Este viernes será un día especialmente delicado en el que probablemente se acentúe una sensación de incomodidad interna, como si algo intentara reubicarse por dentro. La vida parecerá pedirte que mires con más honestidad qué parte de ti quiere evolucionar… y qué parte se aferra aún a lo conocido. Nos revelará con mayor nitidez las contradicciones entre lo que tu mente justifica y lo que tu alma necesita para avanzar.
La Luna en Capricornio formará una cuadratura con Quirón y esto probablemente despertará heridas antiguas relacionadas con la sensación de no ser suficiente o de no estar a la altura. Tal vez surjan dudas respecto a tu valor personal o a tu capacidad para sostenerte emocionalmente en medio de la exigencia externa. Este aspecto podrá doler, pero también abrirá una puerta para observar esas heridas con más madurez y sin dramatismos. Es posible que el trabajo esté en darte contención sin esperar perfección.
Además, la cuadratura de la Luna con Urano añadirá una capa de tensión o irritabilidad inesperada. Emociones que parecían bajo control podrían emerger de forma repentina, y habrá tendencia a querer romper con rutinas o estructuras que antes se aceptaban sin cuestionamiento. Esta energía podría sentirse disruptiva, pero si se canaliza con inteligencia, ofrecerá una vía para liberar patrones que ya no hacen bien.
Será probable que sientas un pulso fuerte entre el deseo de controlarlo todo y la necesidad de permitir que lo imprevisto te enseñe algo. Y ahí estará el aprendizaje más profundo del día: permitirte no tener todas las respuestas, y aun así actuar con integridad y compasión. Aunque el viernes podría traer incomodidades, también marcará el inicio de un pequeño reajuste interno con efectos duraderos.
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